Kaweco EBONIT Sport – un tributo a 140 años de Kaweco

El comienzo de Kaweco se remonta al año 1883. Durante 140 años, Kaweco ha estado escribiendo historia con instrumentos de escritura de alta calidad y, por lo tanto, es conocida como una de las marcas más antiguas en su sector industrial. Un legado que todavía se refleja en el diseño de sus productos hoy en día. Entonces, como ahora, el siguiente principio es revolucionario: crear instrumentos de escritura con mucha pasión y amor que sean un compañero querido y leal para toda la vida.

Con el Kaweco Ebonit Sport, te llevamos a un viaje a través del tiempo. No solo la forma del popular modelo Sport está inspirada en productos de hace más de cien años, sino que el material utilizado también tiene un origen histórico. En una época en la que el proceso de moldeo por inyección aún no se había inventado, el ebonite era a menudo el material preferido para los instrumentos de escritura. El nombre ebonite proviene de ébano, que es muy similar al caucho duro en color y dureza. El expresivo veteado y la superficie altamente pulida sugieren la apariencia de valiosa madera exótica. La composición del material con caucho natural y azufre es totalmente natural. La combinación con elementos chapados en oro subraya el carácter nostálgico de la pluma fuente y realza la cálida veta marrón. Un complejo grabado al buril complementa perfectamente la artesanía impregnada de historia.

Como una adición perfecta, el conjunto limitado incluye un clip nostálgico en dorado para sujetar el bolígrafo de manera segura a un bloc de notas. Además del cartucho de tinta azul real estándar en el bolígrafo, también hay un conveniente paquete de 10 de todos los colores de tinta Kaweco para personalizar tu propia escritura. Todo junto se coloca dentro de un embalaje, que está inspirado en cajas de cartón históricas de aquella época.

Nota: Debido al azufre contenido, la pluma desarrolla una pátina y con el tiempo se convierte en una pieza de colección única con su propio color individual. El estado original se puede restaurar con un simple pulido.